La mera mercadotecnia política no es suficiente. No bastó peinar como Evita Perón a Irene Sáez, otrora Miss Universo, o hacer muñecas Barbie con su efigie. La imagen no puede sustituir el contenido; especialmente en política, el medio no es el mensaje.
______________________
Ignoro a quién se le ocurrió la idea de hacer muñecos que representan a Nicolás Maduro y Cilia Flores trajeados de superhéroes, pero que ambos hayan adoptado la ocurrencia y los regalen dice mucho de sus procesos mentales. Identificarse como Superbigote y Cilita establece una nueva cota de frivolidad política, aun en quienes se dejaron fotografiar bailando Despacito.
No muchos habrá que cayeron por inocentes. LEA
____________________________________________________________
intercambios