El 24 de noviembre de 2010, William Echeverría tuvo la amabilidad de entrevistarme para el programa—En la mañana—que conduce en Globovisión. El diálogo fue centrado por el entrevistador sobre el tema de un nuevo liderazgo político; es la segunda vez que Echeverría me permite acometer un asunto conceptual y general, lo que debo agradecerle mucho. Esta tercera conversación con él fue grabada en la fecha indicada y transmitida el 16 de diciembre del año que acaba de concluir. Según Echeverría, su contenido produjo bastante interés, lo que llevó a Globovisión a reponerla con fecha de hoy. Aquí está el video de la entrevista en un solo archivo continuo. Ya YouTube me ha premiado permitiéndome la inserción de piezas de duración mayor de 15 minutos. (La incongruencia del atuendo de saco y corbata, blue jeans y zapatos Crocs se debe a mi errada creencia de que, como en otras ocasiones, los miembros inferiores estarían tapados por el habitual escritorio). LEA
(Si lo prefiere, puede ver en YouTube la entrevista por segmentos: 1er. segmento, 7′ 09″; 2do. segmento, 7′ 11″; 3er. segmento, 6′ 23″).
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No le pare mucho a lo de los jeans y los zapatos; por lo demás, la camisa estaba bien arrugada. En lo particular fue una buena entrevista, donde el tema central—la Sociedad y el concepto de Democracia—debiera ser la temática introductoria a toda charla, intervenciones, corrillos, foros, etc., que se realicen en el país en cualquier nivel de nuestra sociedad. Hay que comenzar a fortalecer ese ADN Democrático. Pedal y bomba.
Gracias, Carlos, por su estímulo. He debido aclarar que mi señora y jefa no se encontraba en Caracas para el momento de la grabación de la entrevista. Hoy la vio, y me aseguró que estando ella no me habría dejado salir en esa facha.
Como usted dice, esto necesita esfuerzo, mucho pedal y mucha bomba. Espero que se sume usted con su bicicleta.
Hola DOC: Felicitaciones por el desempeño en la entrevista, a mi entender la más completa y formativa de las que he visto. Con respecto a la indumentaria, reconocimiento al mantener el temple y la serenidad al verse pillado por las cámaras… (De allí la suprema importancia de contar con nuestras Esposas y Jefas).
MIS RESPETOS.
Gracias, César. Son seres superiores. Por el tiempo de la reciente detención de Álvarez Paz, Luis Chataing ofreció el siguiente tweet: «Ahora que hay delito de opinión ¿no podrán detener a mi esposa que hoy me dijo: ‘Y tú vas a salir así?»
Usted puso en palabras algo que le comenté a mi madre hace varios meses (tengo 23 años), en lo que planteé que, si se sabe que lo que hace progresar a un país es brindarle seguridad (en todos los aspectos), salud, empleo y educación a su población… ¿qué pinta la ideología?
Hizo que sintiera un gran alivio al escucharlo, valió la pena levantarme temprano hoy, ja ja.
Por lo demás, todo me pareció muy interesante y estoy de acuerdo con mucho de lo que dijo.
Excelente programa.
Gracias, Allison. A su prometedora edad exhibe un tino envidiable para cuestionar de forma que las soluciones emerjan de su cuestionamiento. Le invito cordialmente a leer en este blog Panaceas vencidas.
Hermano, lo felicito. Tremenda entrevista; de verdad lo felicito.
Muchas gracias por su generosidad.
Muchas gracias por su estupendo análisis. Me ha abierto el camino hacia toda una gama de ideas políticas y sociales muy interesantes que establecen como prioridad la solución de los problemas públicos y la modernización de Venezuela, sin el ropaje ideológico y la «batalla de las ideas» preconizada por el gobierno. En cuanto al papel de los ciudadanos, estoy muy de acuerdo con usted, ya que en parte había pensado al respecto, pero muchas gracias porque sus palabras me lo aclaran aún más: nuestro problema es más la falta de una mayor cultura ciudadana y cívica, el poco desarrollo de todos los ciudadanos como nuestra sociedad robusta… Si hubiese sido así, alguien como Chávez no estaría en el poder en Venezuela. Gracias de nuevo.
Gracias a usted, Javier, por su amable evaluación. Veo que ha asido Ud. la esencia de una nueva política post ideológica. Le invito cordialmente a considerar en este blog el material de los siguientes enlaces: Panaceas vencidas, Este piazo’e pueblo y Temas de Política Clínica (5).
¡Hola! ¡Excelente entrevista! Confieso que no había oído hablar de usted y mucho menos de este blog… Sin embargo, el 4 de enero vi la entrevista en reposición y me gustó tanto que retrasé mi salida hasta terminar de verla y ¡el mismo día me dediqué a leer algunos de los temas escritos en su blog! ¡Mis más sinceras felicitaciones! Me ha gustado mucho su forma de plantear estas ideas, de aclarar y profundizar conceptos, de introducir el elemento jocoso en la seriedad del tema para lograr hacerlo más digerible sin banalizarlo… y sobre todo la forma que tiene de invitar a la reflexión. Le he recomendado su lectura a todos mis amigos que de alguna forma se interesan por el acontecer político y social… Espero poder seguir leyéndole… ¡Gracias!
Caray, estimado Néstor, lo que usted pone generosamente es un acicate que me compromete, una especie de diploma fabricado por un ciudadano. Estoy conmovido y agradecido. Si no lo ha hecho ya, le ruego lea acá, en la pestaña correspondiente de la barra superior, el Código de Ética que regula mi conducta en materia política. Era a algo así a lo que me refería en la entrevista con Echeverría.
No sabía que en Venezuela había locos entretenidos ocultos, rumiando el conocimiento por el solo placer de fastidiar a los pragmáticos, figurar y, en algunos casos, de justificar la existencia en la corta y efímera vida que nos toca.
Sepa usted que en alguna parte de la inmensa geografía de este país, se comparte algunas de sus ideas, lo cual complace, consuela y estimula el trabajo intelectual de pensar soluciones y caminos a los problemas que nos toca vivir como sociedad, como familia y como individuo.
¿Quién sabe? A lo mejor alguna vez nuestros caminos se crucen, pero de momento me queda el dulce sabor de saber que habemos más locos en la reserva moral e intelectual, con nuestras fuerzas y capacidades intactas para cuando haga falta y sea el momento.
Saludos, y siga jodiendo y predicando, usted que puede y mientras pueda. Yo, de momento, regreso a mi lugar común de seguir bregando por ganarme la locha para comprar el pan para los míos y para mí.
Posdata: a ratos, y cuando la vida me lo permita, me deleitaré revisando su blog, y aprendiendo y cuestionando y analizando y disfrutando.
Gracias, estimado tocayo, por sus palabras de estímulo. Para Michel Foucault (Historia de la locura en la época clásica, 1954), quienes detentan el poder son los que determinan lo que es normal. Una buena dosis de modestia es aconsejable en quienes emplean la “locura” como método; si tienen razón, su anormalidad llegará a ser, con el tiempo, algo enteramente normal y nuevos locos se harán necesarios.
SEÑOR ALCALÁ:
Tengo familia en Venezuela desde hace más de 30 años (yo tengo 46) y su entrevista, a partir de la cual además soy lectora de su blog, me llena de esperanza sobre el hecho de que estén aún en ese país personas de tanta inteligencia y claridad mental que, lejos de todo histerismo y fanatismo, tengan la tranquilidad para conceptualizar sobre la situación política del país de la forma en que usted lo hace.
¿Qué pasa que más y más venezolanos no lo conocen y/o escuchan? ¿Qué pasa que usted no promueve más foros de discusión sana sobre las salidas país que debería diseñarse? El tema de los «futuribles», como diseño (y sueño) de un futuro que se propone para ser construido, es una exigencia, especialmente para las épocas de crisis, ya que además vuelven sobre la necesidad de un país de tener ciudadanos competentes.
Mi admiración y mi respeto. Todo el ánimo para que continúe aportándonos y sembrando inquietudes.
OLGA
Doña Olga: la generosidad de su evaluación me compromete y me anima, en general, para continuar en mis trabajos políticos. Le ruego encuentre, en una de las pestañas de la barra superior del blog, el código de ética que rige mi conducta en ese oficio. Era a algo así a lo que aludía en la entrevista con William Echeverría.
Pero también me obligan sus palabras a respuestas más concretas. Si se fija, al final de la entrevista dejo caer una observación: «Y eso pasa con los medios de comunicación». Ya quedaba poco tiempo y Echeverría no recogió la implicación de lo que acababa de leer: Serán, precisamente, actores nuevos. Exhibirán otras conductas y serán incongruentes con las imágenes que nos hemos acostumbrado a entender como pertenecientes de modo natural a los políticos. Por esto tomará un tiempo aceptar que son los actores políticos adecuados, los que tienen la competencia necesaria, pues, como ha sido dicho, nuestro problema es que “los hombres aceptables ya no son competentes mientras los hombres competentes no son aceptables todavía”. Es inevitable un trabajo perseverante para vencer la resistencia inercial de los medios de comunicación, que reflejan la inercia general presente en la sociedad, a nuevos planteamientos. Lo que es la costumbre es ofrecer el escaso espacio de los medios de comunicación a los actores más conocidos. Escribí el texto citado en febrero de 1985, hace 26 años. Aún no me he rendido; seguiré con la prédica, pero puedo reportarle que las ideas que expuse son siempre bien recibidas por los ciudadanos, quizás porque no tienen nada de misterioso y resuenan con el sentido común. En todo caso, como dice Cristopher Hodgkinson en La filosofía del liderazgo, «El actor no debe atarse afectivamente al resultado sino al proceso. El compromiso es con la obra misma; con la carrera y no con el premio; con la batalla y no con la victoria». Estaré muy conforme si el destino me depara, no un papel ejecutivo, sino el de precursor o profeta. Tarde o temprano, la política será hecha según la veo, puesto que los electores aprenderán a exigirla de los políticos profesionales.
Por otra parte, tengo ahora el espacio de la Internet a mi disposición, el que no existía en 1985. En Venezuela hay ya entre 10 y 11 millones de internautas y de éstos el 68% corresponde a lo que los encuestólogos denominan clases D y E; es decir, a los estratos de menores recursos, que muestran así una evidente vocación de modernidad que es preciso acompañar. Creo que a partir de una decisión que anunciaré pronto, podrá el blog suscitar mayor interés y elevarse su audiencia, que es constante pero muy pequeña todavía. (Alrededor de 3.000 visitantes por mes). Espero, además, hacerlo más interactivo. También tengo previsto hacer talleres y conferencias sobre el enfoque clínico de la Política, como modo de difundir a los ciudadanos sus nociones fundamentales.
La noción de futuribles, término acuñado por la escuela francesa de futurología, me es familiar desde los años sesenta, cuando usábamos los conceptos de Pierre Massé y otros—también la metodología estadounidense de Herman Kahn y, luego, la de autores como John Naisbitt—en trabajos del Instituto para el Desarrollo Económico y Social. La comprensión del presente y una visión de futuro son seguramente las cualidades más necesarias en un estadista. Alexis de Tocqueville ya definía el “verdadero arte del Estado”—en El Antiguo Régimen y la Revolución—de este modo: “una clara percepción de la forma como la sociedad evoluciona, una conciencia de las tendencias de la opinión de las masas y una capacidad para predecir el futuro”.
Muchísimas gracias por su participación. Le ruego tenga a este blog como su casa.